Bueno, esta mañana, ya superadas las 48 horas de plazo, mi blog de spaces sigue abierto y todas las imágenes que había, en el momento de la denuncia, siguen en él.
De todo cuanto se dijo en las diferentes entradas que hice a lo largo de los dos dias que duró la batalla por impedir su cierre, ya fuera en las propias entradas o en los comentarios que generaron, hay un detalle que me sigue dando vueltas en la cabeza y del que se derivan dos preguntas: ¿A que edad empiezan a bloguear los niños? y ¿Hasta que edad se les puede considerar niños que precisen de tutela, para ver ciertas imágenes?
En cuanto a la primera, pienso que, aunque hoy en día los niños, como quien dice, nacen con el ordenador puesto, es decir, tienen contacto con ellos desde muy pequeñitos, no creo que tengan la habilidad suficiente para llevar un blog. Pienso que durante la etapa de la infancia los niños usan el ordenador, básicamente, para jugar. Después de todo, usar un blog, ya sea como autor o como lector, implica, al menos, saber leer y escribir y estas disciplinas, si no es que han cambiado mucho las cosas desde que mis hijas eran pequeñas, empiezan a aprenderse en primaria.
Mi hija mayor empezó a leer con tres años, pero no sabía juntar más de dos letras y lo aprendió tan pronto porqué me preocupé de enseñarle, pues en parvulitos no pasaban de hacer manualidades y apenas aquello de "mi mama me mima".
Así que, suponiendo que es a partir de los cinco o seis años cuando un niño es capaz de comprender lo que lee y de plasmar lo que piensa escribiéndolo, ¿les puede interesar hacerlo en un blog? ¿tienen la suficiente habilidad o capacidad para hacerlo?.
Acceder a los blogs de spaces es relativamente fácil, basta con tener una cuenta de correo de livemail, hotmail, o msn.
Y, por supuesto, son de uso habitual entre los escolares, pues es una forma de que aprendan a manejar el ordenador, pero creo que esta práctica se inicia más adelante. (Puedo estar equivocada, ya no tengo niños en edad escolar y estoy muy desfasada en estos temas).
Pero lo que si está claro es que para utilizar mesenger has de saber leer y escribir.
Los jóvenes que son, se supone, sus usuarios más habituales, suelen escribir como si de mensajes de móvil se tratara, acortando palabras, comiéndose las vocales, etc. Pero incluso esta forma de hacerlo precisa del conocimiento básico de la escritura.
Así que, retomando la primera pregunta, ¿a que edad podemos pensar que un niño puede empezar a interesarse por los blogs? ¿ocho, o nueve años? ¿antes?.
Valga apuntar que no he visto, todavía, en mis excursiones por spaces, ningún blog perteneciente a nadie menor de 14 años.
Y a esa edad ¿que blogs pueden interesarles? ¿los de sus compañeros o los de personas que pueden ser sus padres o abuelos?.
Lo que me lleva a la segunda pregunta que me hago ¿hasta que edad se les ha de proteger de estas imágenes?
Una de las materias que se estudian en primaria es la de ciencias naturales ¿no? y en este campo estará incluido el estudio del cuerpo humano ¿no? (cuando yo estudiaba era así).
Me parece recordar que cuando mis hijas trataron este tema, el cuerpo humano aparecía entero, con todos sus atributos, explicando la diferencia entre sexos, a nivel fisiológico; los distintos aparatos que lo componen, con sus órganos correspondientes, (que me corrijan si me equivoco).
Si eso es así, si no estoy equivocada, ¿porqué no pueden ver estas imágenes en otros contextos?.
No hablo de pornografía. Por supuesto. Hablo de algo completamente natural, un cuerpo tal como es, como se ve en los cuadros de los museos, ¿o acaso vamos a impedirles el acceso a ellos ya que contienen "material inadecuado"? Que yo sepa no hay ninguna ley que impida el acceso de los niños a los museos, ni que haya restricciones de edad para entrar en ellos.
Se habla de colocar, en los blogs que tengamos alguna imagen de este estilo, el aviso de que puede haber material inapropiado.
A mi modo de ver, si no se incluye algún atributo que impida su acceso, en el caso de que los padres tengan activada la función correspondiente, un simple aviso es la manera más idónea para que los posibles niños que tropiecen con ellos entren a verlas, pues la curiosidad infantil, sobre todo hacia lo prohibido, no tiene parangón.
Recuerdo cuando era pequeña, que había palabras prohibidas de mencionar si había niños cerca. La típica frase "hi ha roba estesa/hay ropa tendida" para señalar la presencia de niños, la he oido miles de veces.
Pero no siempre nuestra presencia era detectada, o la conversación entre los mayores tomaba un giro inesperado, y se podían escuchar palabras que escapaban a nuestra comprensión.
Al día siguiente era habitual, al llegar al colegio, acudir raudos al diccionario en busca de su significado. No siempre la empresa tenía éxito, había modismos que no figuraban en él, pero cuando la encontrábamos a menudo nos dirigía a otras definiciones, con lo que acabábamos aprendiendo más que si no la hubiésemos encontrado.
Hablemos de la red, intenet.
Todos los niños que tengan acceso a los blogs han de ser usuarios de un ordenador y de internet. En este caso no solo tendrán acceso a los blogs, sinó a todo cuanto contiene la red.
Y hoy en día todo está en la red.
Se puede encontrar cualquier cosa, solo con introducir una palabra en el buscador.
Llevada por el cabreo que cogí al pensar que aquellas imágenes pudieran ser el objeto de la censura, tuve la idea de, si me cerraban el blog por su causa, abrir uno nuevo para publicar una única entrada, en la que mostrar la diferencia tan abismal que hay entre arte y pornografía y me puse a buscar fotos de cuanto allí está prohibido, tanto al natural como sus representaciones artísticas.
Me resultó más fácil encontrar fotos de coños o pollas al natural que de cuadros que los representaran; bastó una palabra para encontrarlos. Para encontrar los cuadros tuve que acudir a la búsqueda avanzada, o teclear el título y el autor del cuadro.
Incluso se puede acceder a imágenes auténticamente inadecuadas desde una página de dibujos infantiles, los llamados Gif's.
En una de las muchas que existen en la red, que exponen dibujitos de esos, hay, en la lista de temas, el apartado Dibujos animados para adultos. Pero si pinchas en el enlace, nada impide su acceso. No hay ningún filtro para conocer la edad de quien quiere verlos.
Imágenes como, por ejemplo, los enanitos follándose a Blancanieves por todos los sitios imaginables, con movimiento, o chicas masturbándose, rodeadas de publicidad de un sitio dedicado a las descargas de pornografía, con imágenes bastante explícitas de lo que puedes encontrar en él. Sin filtros. En una página básicamente infantil.
Aunque. en el fondo, todo eso no es más que una cuestión de educación.
Sería conveniente educar a los hijos sin falsos puritanismos, no meterles en la cabeza la idea de que el cuerpo humano al naural es algo pecaminoso, aunque para ello han de ser los propios padres los que lo crean.
Mientras los padres vean, en un cuerpo humano desnudo, inmoralidad, será imposible que eduquen a sus hijos con un pensamiento distinto.
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