19 de julio de 2012.
Cientos de miles de personas se han manifestado en 80 ciudades de la nación, en contra de las medidas económicas aplicadas por el gobierno estos últimos días.
No hace falta que las mencione. Todos las conocemos y las sufriremos.
No hace falta que las mencione. Todos las conocemos y las sufriremos.
Y yo me hago la pregunta que he usado como título de la entrada: ¿Y ahora que?
Porqué a un gobierno que dispone de mayoría absoluta, las manifestaciones, por muy multitudinarias que sean, se la sudan. Buena prueba de ello fueron las manifestaciones, más multitudinarias que las de hoy, si cabe, contra la guerra de Irak.
¿Y que pasó?
Que nos metieron en una guerra que nadie deseaba que acabó matando a un montón de personas, que a buen seguro habían estado en las manifestaciones contra la guerra, aquel nefasto 11 de marzo.
¿Y que pasó?
Que nos metieron en una guerra que nadie deseaba que acabó matando a un montón de personas, que a buen seguro habían estado en las manifestaciones contra la guerra, aquel nefasto 11 de marzo.
Igual que se la sudan todas las opiniones habidas y por haber que demuestran que las cosas se podían haber hecho de otra forma.
Porqué estas medidas no se han aplicado por los motivos que han dicho.
Esa es la mentira más flagrante de este gobierno.
Esa es la mentira más flagrante de este gobierno.
Estas medidas que han aplicado, y las que van a aplicar de aquí a que acabe su mandato, (si es que acaba), van encaminadas precisamente a eso: A no acabar.
Quieren reinstaurar la dictadura, disfrazada de lo que sea, pero acabarán montándoselo de tal forma que dentro de 4 años, cuando todo el país esté en las últimas y ya solo queden ellos y sus amigos, no haya más elecciones.
Aunque les montáramos el mismo cirio cada día. No cambiará nada.
Aunque se monte una huelga indefinida. No cambiará nada.
Porqué para que algo cambie, ESOS, han de desaparecer de la política. PARA SIEMPRE.
Y a todos ellos y a sus amigotes se les ha de encarcelar por todo el daño que han hecho a este país.
Pero nada de esto pasará. No por las buenas.
Mucho me temo que para que algo cambie, en este país, en estos momentos, han de rodar cabezas.
Y no las del pueblo precisamente.
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