Rafa me ha colgado un meme al que no se si voy a poder responder del modo que imagina.
Se trata de encontrar personas ligadas a la derecha más casposa, retrógrada y supercatólicos de pro, que hayan hecho, deshecho y rehecho sus vidas, a nivel matrimonial, o de pareja, pero que por su condición de golpeantes de pecho estén en contra de la diversidad familiar.
La verdad es que no soy una lectora habitual de las llamadas revistas del corazón, prefiero las de divulgación cultural o científica, ni tampoco soy seguidora de programas de marujeo, mi curiosidad va por otros derroteros. Si a esto añadimos que a los más conocidos de esos personajes ya los ha mencionado él, ¿que me queda?.
A la vista de lo antedicho, solo me queda una opción. Contaros un caso real.
Entre 1966 y 1971 estuve trabajando como auxiliar de un abogado, muy conocido en aquella época. Su esposa era una habitual de las mesas petitorias de la Cruz Roja y otros eventos y solia aparecer en las fotos de la página de sociedad del Hola.
Eran años de nacional-catolicismo.
En las escuelas de índole religiosa todavía era de obligado cumplimiento la misa dominical, avalada por un panfleto que tenía que firmarte el rector de tu parroquia, si se daba el caso de no asistencia a la misa que se celebraba en el propio colegio.
El destape, que poco después innundaría los quioscos del país, de la mano de Interviu, todavía no había aparecido, follar antes del matrimonio era un pecado de los mas mortales que hubiera y el divorcio, o la separación civil, todavía no se avistaban en el horizonte legal.
Mi jefe solía llevar la consultoria jurídica de varias empresas internacionales, pero también se encargaba de algunos temas personales de los directores de dichas empresas.
Una de mis obligaciones era transcribir mecanográficamente sus apuntes.
En cierta ocasión me di cuenta, por el contexto de lo que estaba escribiendo, de que el tema que se trataba estaba relacionado con una nulidad matrimonial.
La pareja en cuestión llevaba casada bastantes años y tenian más de dos hijos, ya mayorcitos.
Le planteé a mi jefe el asunto, explicándole mi asombro ante la demanda, basada ¡agárrate! en la consabida no consumación matrimonial, única excusa válida, practicamente, ante el tribunal eclesiástico, para anular un matrimonio. (También hay la de consanguinidad, pero ésa es demostrable).
El abogado me respondió con una sola frase: "Pagant, Sant Pere canta".
Creo que no necesita traducción.
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Ahora imagino que debería pasar este meme a otros, pero no se me ocurre a quien.
Como he de ir a trabajar, me lo iré pensando y si a la vuelta, tras visitar a todos los que acostumbro, veo que alguno se ha librado, se lo enchufaré. (Que mala soy).
2 comentarios:
Eulalia.Yo ya he vivido esto en primera persona, a mi me anularon el primer matrimonio y la causa fue "miedo reverencial",toma ya.Que vergüenza,allí mentíamos todos para conseguir la nulidad,es un puro teatro,pero las cucarachas lo quieren asi.No había divorcio.Que atrasados estabamos en este pais con paquito.
Ja,ja,ja,ja Eulalia la canción que me has puesto en mi blog es tu regalo de reyes ??
Pues vale !!
Yo no lo hubiera sabido hacer,como siempre.
Gracias.
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